Participamos en esta ocasión del privilegio de poder agradecer la notable contribución académico-institucional emprendida con la pasión, con la calidad y con la honestidad intelectual, que ha significado la dirección de la Revista Contextos, del Departamento de Ciencias de la Educación, a cargo de Alicia Vázquez desde el año 2010 hasta la actualidad. Quienes hemos coordinado un monográfico o gestionado el Departamento del que depende la revista, nos aproximamos apenas a la complejidad y compromiso que exige la dirección de la revista y lograr que se publiquen 26 volúmenes (del número 10 al 35) de manera continuada entre los años 2010 y 2023. Alicia asumió esa complejidad y ese compromiso institucional, en todas sus aristas, abrazando lo que siempre la apasionó: la generación de conocimientos, sus posibilidades de comunicación y puesta en diálogo. Allí Alicia hizo honor, como en otros campos de actuación, al leer, releer, escribir y revisar como instancias de construcción y ampliación de saberes.

Agradecerle a Alicia y hablar de su labor, es agradecer su papel en nuestra formación y eso es, también, mirarnos a nosotros mismos. En buena medida, con Alicia hemos llegado a ser este grupo de académicos, sin ser cada uno igual al otro. Con ella, y por ella también, logramos constituir y seguimos constituyendo un grupo que ha trabajado de manera sistemática. No conocemos otro terreno que aquel en el que se intenta conocer en profundidad y eso, por suerte, nos permitió enriquecer siempre un poco más los saberes que fuimos alcanzando. Hemos pensado habitualmente de formas distintas, sin perjudicarnos mutuamente por ello, porque el respeto siempre ha logrado imponerse más allá de las diferencias. El respeto por la pluralidad de posiciones intelectuales sin perder la calidad científico-académica es un principio innegociable en la conducción de una publicación. Y eso ha sido sostenido hasta el último número que conocemos de la Revista. Escribir, publicar, editar, son tareas tan imperiosas e imprescindibles, como ingratas e impredecibles. Trabajar para que una posibilidad sea concretada, posibilitar que la palabra de unos sea puesta al alcance de otros, sin asegurar quiénes la leerán. No es poco. Por eso, de nuevo, una vez más en nuestra vida profesional, gracias, Alicia.